La capacidad de los nuevos modelos de Inteligencia Artificial, IA, superará a la inteligencia humana al final del próximo año, siempre que el suministro de electricidad y hardware puedan satisfacer las demandas de esta tecnología, cada vez más potente. Según el billonario Elon Musk, quien dirige Tesla, la red social X y SpaceX, “tendremos una IA que será más inteligente que cualquier ser humano, probablemente hacia finales del 2025″. En los próximos cinco años, las capacidades de la IA posiblemente superarán las habilidades de los seres humanos, predijo Musk el pasado lunes durante una entrevista en X con Nicolai Tangen, director ejecutivo de Norges Bank Investment Management.
Una serie de avances en IA en los últimos 18 meses, incluido el lanzamiento de herramientas de generación de video y chatbots más capaces, más poderosas, han impulsado la frontera de la IA más rápido de lo esperado. Demis Hassabis, cofundador de DeepMind de Google, predijo a principios de este año que el dominio de la IA podría alcanzarse para 2030.
El ritmo de desarrollo de la IA se ha frenado por un cuello de botella en el suministro de microchips, particularmente de los producidos por Nvidia, que son esenciales para entrenar y ejecutar modelos de IA. “En uno o dos años, la limitación será otra, el suministro de electricidad”, sostiene Musk. El entusiasmo de Musk por participar en la carrera de la IA va en contravía de la postura de alto perfil que adoptó el año pasado, pidiendo una pausa en el desarrollo avanzado de la IA. Advirtió entonces sobre los “profundos riesgos para la sociedad y la humanidad”, que plantean las herramientas de IA super poderosas y sugirió una pausa inmediata en el desarrollo de cualquier sistema más poderoso que el GPT-4 de OpenAI, el modelo líder en el mercado.
La realidad virtual y el peligro inminente que afrontan la humanidad con los rápidos avances tecnológicos de la AI son innegables y hasta cierto punto, predecibles, cuyas herramientas pueden acelerar la obsolescencia de numerosas profesiones y trabajos del modo de producción actual.