Como amigos de Israel, remitimos al presidente Gustavo Petro una misiva que, a la letra, pretende manifestarle:
– “Nuestro dolor y desacuerdo con la ruptura de relaciones entre Colombia y el Estado de Israel. Es la interrupción de una relación que ha durado más de 75 años, con amistad y confianza entre las dos naciones.
El desacuerdo que tiene hoy con decisiones de su Gobierno no debe transferirse a sus ciudadanos, que han sido siempre amigos y colaboradores nuestros.
Su decisión además lo inhabilita señor presidente para servir de eventual mediador en conversaciones que se están llevando a cabo y que sin duda se intensificarán en el futuro cercano.
Una coyuntura dolorosa que debe ser vista como una oportunidad de acercar nuestros pueblos en su búsqueda de soluciones para los dos pueblos.
El pueblo de Israel ha sido perseguido por siglos, pero indudablemente tiene un peso cultural muy significativo en el mundo de occidente y en el oriente.
De él se derivaron el cristianismo y el Islam, y su filosofía ha irrigado siempre nuestro pensamiento. Hoy Israel es una fuente de ciencia y de tecnología pioneras, lo que ha compartido con nosotros y otros países de Latinoamérica en una colaboración generosa y abierta.
Ojalá pudiera usted reconsiderar su decisión, que estamos seguros no representa la voluntad de la mayoría de colombianos” -.
Hasta acá la carta suscrita por decenas de connacionales, que le hacen un llamado sosegado a la reflexión al Gobierno Nacional para que enderece este entuerto y vuelva por el camino correcto e histórico de relaciones sólidas y fructíferas entre Colombia e Israel.
Para la mayoría de los colombianos, no puede ser de otra manera. Queremos que se restablezcan a la mayor brevedad los nexos diplomáticos entre las dos naciones.
Colombia cuenta, de tiempo atrás, con el aporte empresarial de una comunidad judía vibrante, pujante, que de forma generosa e inteligente ha trabajado con tesón en la creación de un tejido empresarial y de empleo de calidad, que es un orgullo nacional.
Son colombianos de origen judío, que también sienten y llaman a Colombia su Patria.