La experiencia confirma que la mejor época para un Mundial de Fútbol es a mediados del año con transmisiones en horarios comerciales y familiares.
Durante el último mes, los aficionados al fútbol en los cinco continentes han estado pegados a sus pantallas de televisión para ver la Copa Mundial de la FIFA 2022, organizada por el Emirato de Catar. Un grupo de privilegiados pudieron asistir en vivo y en directo a las diferentes sedes de primer mundo construidas especialmente para el Mundial 2022, con un presupuesto faraónico que supera los US$300 billones.
Ciertamente, los cataríes no escatimaron recursos para organizar la Copa Mundial de Fútbol, ni para torcerle el pescuezo a las directivas de la FIFA para garantizar, con prácticas non santas, su realización en Catar. Joseph Blatter, presidente de la FIFA en 2010, época en la que Catar fue escogido país anfitrión de la Copa Mundo 2022, le dijo tardíamente al periódico suizo, Tages Anzeiger, que “la elección de Catar fue mala” y añadió que “fue un error”.
La verdad es que la realización del Mundial 2022 a finales del año se robó las Navidades de todo el planeta. Las fiestas decembrinas pasaron a segundo plano. Los cambios de temperatura en Catar dieron origen a la denominada ‘fiebre del camello’, que afectó a los aficionados y los jugadores de Francia en los días finales de la Copa Mundial. La experiencia vivida confirma que la mejor época para un Mundial de Fútbol es a mediados del año con transmisiones televisivas de los partidos en horarios comerciales y familiares. Ahora bien, los cataríes trataron de ocultar los graves hechos ocurridos durante la construcción de las sedes deportivas. Según una investigación del periódico inglés, The Guardian, al menos 6.500 trabajadores extranjeros perdieron la vida durante este período, lo cual ha sido desmentido con vehemencia, pero sin convencimiento, por el Emirato catarí.
çEn estos días, la prensa internacional también ha dado a conocer los hallazgos de los allanamientos de la policía belga de varias oficinas europarlamentarias, como parte de una cuidadosa investigación por corrupción, que involucra al anfitrión de la Copa Mundo 2022. El fiscal federal belga informó que sus dependencias habían registrado 20 locales, incluidas casas y oficinas de varios europarlamentarios. En estos registros, confiscaron alrededor de un millón y medio de euros en efectivo.
Varios miembros del Parlamento Europeo han sido acusados de “participación en una organización criminal, blanqueo de capitales y corrupción”. Eva Kaili, socialista griega, vicepresidenta del Parlamento Europeo, fue despojada de sus responsabilidades y militancia política. Úrsula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, dijo que las acusaciones contra Catar, relacionadas con la compra de influencia política, eran de “máxima preocupación” y socavaban la confianza de los ciudadanos en la Unión Europea.
Doha rechaza cualquier acusación de mala conducta. Los acusados, sin embargo, empiezan a cantar y confirmar el recibo de los sobornos cataríes usados para comprar conciencias y lavar su imagen internacional.
Andrés Espinosa Fenwarth
Miembro del Consejo Directivo del ICP.
andresespinosa@inver10.co