La doctrina del enemigo interno

La compleja fabricación de un enemigo interno se logra mediante la manipulación de la tribuna pública y la masificación del mensaje.

El presidente Gustavo Petro empleo la conmemoración del 12 de octubre en Caldono, Cauca, para iniciar un proceso político de resistencia, de oposición al establecimiento, de graduación de su enemigo interno, que en sus diferentes esferas representa la nación fundada llamada Colombia desde el Congreso de Angostura de febrero de 1819.

El trascendental discurso del presidente Petro define su visión política del enemigo interior. Para el mandatario de los colombianos -no solamente de los pueblos indígenas- “el primer obstáculo de un Gobierno es su propio interior, sus normativas, los procedimientos construidos y escritos a través de normas durante décadas por personas que pertenecen o pertenecieron a sectores sociales que no son propiamente los que nos han dado el triunfo…Y no es una, no (son) dos que pudiéramos ubicar fácilmente y cambiarlas; son miles en cada ministerio, en cada institución”.

Para el presidente Petro, el enemigo interno es el “aparato estatal”, que define como el “acumulado de historias que tiene (n) que ver con las historias de la dominación social”, de funcionarios que califica de “ignorantes”. El presidente afirma que “así es en cada oficina pública de Colombia. Por eso el principal rival del Estado, del Gobierno, está en su interior. Es un enemigo interno, representado por creencias, maneras de pensar, no simplemente por personas. Que al final lo que producen en concreto es que no se permitan los cambios, a pesar de que el presidente quiera. El mandatario individualiza como enemigos internos al ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, quien, con sensatez, se opone a la emisión de TES para la compra de las tres millones de hectáreas previstas en el Acuerdo de Paz de 2016, y a los gremios, académicos y analistas, que. Y añade el presidente que “así sucesivamente, encontraremos no solamente una oposición interna dentro del Gobierno, sino una oposición externa tratando de articular fuerzas sociales que logren tal contundencia que detenga las reformas del Gobierno”. La doctrina de construcción del enemigo interno ha sido usada por la izquierda socialista para dividir, y por tanto, al proceso revolucionario de deconstrucción de un país y de su objetivo principal, la toma del poder y la refundación autocrática de una nueva nación. La compleja fabricación de un enemigo interno se logra mediante la manipulación de la tribuna pública y la masificación del mensaje, cuidadosamente calibrado, por medio de la caja de resonancia de los medios de comunicación, pese a que son fustigados, injustamente, por pertenecer a las clases dominantes que se propone domeñar, como si la propiedad privada fuera sinónimo de carencia de objetividad informativa y política, aportación económica y social. Ahora más que nunca, la grandeza y la fuerza se encuentran en la oposición.

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1 comentario

  1. Héctor Gutiérrez P.

    La metodología de la guerrilla cuyo representante mas reconocido es Petro, tiene la modalidad desde siempre de echar la culpa de todo lo malo que hace, a la oposición y a los enemigos políticos. De igual manera hace que la situación de su País y de su gobierno vaya empeorando para poder mostrar que los enemigos No dejan mejorar las condiciones del Pueblo al oponerse al cambio que proponen que nunca pueden demostrar que es realmente efectivo, pero sus mentiras reiteradas y repetidas tan frecuentemente se vuelven verdades ante la gente que las escucha proviniendo de muchos de sus compinches. La tarea es mostrar claramente su metodología mentirosa y hacer ver sus propósitos desestabilizadores.