La crisis energética se ha agravado por la reducción del suministro de petróleo por parte de Venezuela, cuyos envíos en los últimos meses han fluctuado en torno de los 30.000 barriles diarios, equivalentes a un tercio de las necesidades.

La afrentosa dictadura marxista de Cuba celebra los 65 años de la usurpación del poder con el mayor apagón eléctrico de su historia. Cuba tiene siete centrales termoeléctricas de fabricación soviética construidas hace más de cuatro décadas, afectadas por un déficit crónico de inversión y mantenimiento.

La crisis energética se ha agravado significativamente por la reducción del suministro de petróleo por parte de Venezuela, cuyos envíos en los últimos meses han fluctuado en torno de los 30.000 barriles diarios, equivalentes a un tercio de las necesidades de combustibles líquidos de la isla.

Los apagones paralizan la vida cotidiana de los cubanos. Los semáforos, los cajeros automáticos, las gasolineras, el pago electrónico de las tiendas, las oficinas de la administración socialista, las cocinas eléctricas de los hogares, las neveras, los ventiladores y las bombas de agua de las ciudades y de las viviendas no funcionan a causa de los repetidos y largos apagones. En los momentos de mayor demanda, entre el 33% y el 45% del país queda sin energía eléctrica, al igual que el sector productivo.

En 2024, según un informe del Observatorio Cubano de Derechos Humanos, el 90% de los cubanos viven en extrema pobreza, El hambre y la escasez de productos de primera necesidad, como arroz, huevo o harina, son parte de la amarga cotidianidad de los isleños.

El escritor cubano, Leonardo Padura, explicó en diálogo con EFE, que los cubanos se encuentran en la disyuntiva de quedarse o irse de la isla. “La opción que le queda a la gente es irse de Cuba”. Y solo se va el que pueda pagar, porque el escape por Nicaragua y la opción de los coyotes por la frontera mexicana cuesta alrededor de 10.000 dólares por persona. El nivel de desesperanza y agobio es tal que ha originado una emigración masiva de cubanos, que el economista y demógrafo, Juan Carlos Albizu-Campos, calcula en 1,8 millones de personas desde 2021. En este periodo, la población total de la isla se redujo 18% de 10,4 millones a 8,6 millones.

¡Exilio o socialismo!