La Paz Total se ha traducido en lo corrido del año en el mayor número de masacres de los últimos tiempos, 27, con 88 víctimas de acuerdo con Indepaz, equivalentes a la tercera parte de los registros violentos del año pasado. La realidad es que la Paz Total del presidente Gustavo Petro y su improvisado sustento bilateral de cese al fuego, que el mismo ELN desestimó públicamente, ha sido sistemáticamente violado en 58 ocasiones por los grupos armados al margen de la ley. 

Según la Defensoría del Pueblo, estas violaciones comprenden homicidio de civiles, secuestros, enfrentamientos armados, desplazamientos, quema de vehículos, voladura de oleoductos, bloqueos y control territorial. En desarrollo del paro armado, el Clan del Golfo ha realizado centenares de hechos violentos contra la población civil en 61 municipios en 8 departamentos del territorio nacional. En vista del fracaso del cese bilateral de hostilidades y el preocupante aumento de la inseguridad ciudadana, Petro se vio obligado a ordenarle a la Fuerza Pública reactivar todas las operaciones militares contra el Clan del Golfo. 

Resulta paradójico que Rodrigo Londoño -alias Timochenko, antiguo exguerrillero de las Farc y ahora jefe del Partido Comunes-, afirme que se sentía “más seguro” durante el mandato del presidente Iván Duque que ahora durante la presidencia de Gustavo Petro. 

La realidad es que la principal bandera del gobierno Petro, la Paz Total, es un fracaso total por donde se mire; reflejo de la carencia absoluta de conocimiento por parte del comisionado de paz, Danilo Rueda, quien en su primer acto de gobierno se deshizo de decenas de profesionales calificados con probada experiencia en procesos de paz anteriores, los cuales fueron reemplazados por inexpertos afectos al Pacto Histórico. Primó, entonces, la ideología sobre el conocimiento en la gestión de decenas de procesos de paz simultáneos con el ELN, las disidencias de las FARC, que se opusieron al proceso de paz del gobierno de Santos y 50 grupos armados ilegales con intereses criminales vinculados con el narcotráfico, la minería y la inmigración ilegal. 

¡Crónica de un fracaso total de paz anunciado!