Citibank considera que la economía de Venezuela es un “desastre” que se acerca peligrosamente a un serial default –cesación de pagos–-, excepto en los bonos soberanos respaldados por la petrolera estatal, Pdvsa.

Luis Oliveros, profesor de la Universidad Central de Venezuela, va más lejos: “el Gobierno decidió hacer un default selectivo en el mercado interno y no en el externo”, habida cuenta de que el no pago de los bonos venezolanos y los pasivos de Pdvsa podrían desencadenar una situación inmanejable de embargos y litigios internacionales.

Venezuela tiene el régimen cambiario más disfuncional y complejo del mundo, regido por cuatro tipos de cambio: el Centro de Comercio Exterior (Cencoex) autoriza las divisas a 6,30 bolívares. El Sistema Complementario de Divisas (Sicad I) entrega dólares mediante subastas, con tasas de cambio en torno de los 11 bolívares. El Sistema Cambiario Alternativo (Sicad II) vende dólares a una tasa de paridad de 50 bolívares. El mercado paralelo negocia dólares a 70 bolívares.

De acuerdo con el diario Nuevo Herald de Miami, las reservas líquidas de Venezuela ascienden a 600 millones de dólares. Los 20 mil millones de dólares restantes están representados por posiciones en oro, que garantizan el pago de las acreencias contraídas con China, Rusia y Brasil. Según el Inter American Trends, las exportaciones de crudo venezolano que generan divisas fueron de 38.776 millones de dólares en el 2013, la mitad de lo que registra oficialmente el Gobierno, que contabiliza adicionalmente las exportaciones concesionales que no causan reintegros de moneda extranjera. Las limitadas exportaciones no petroleras ascendieron a 2.100 millones de dólares.
El déficit comercial es de 12.147 millones de dólares, desequilibrio que no es compensado por la inversión extranjera, valorada en 5 mil millones de dólares.

Según Ecoanalítica, la deuda comercial con los privados asciende a 25,6 mil millones de dólares al cierre de marzo del 2014. Al desagregar los compromisos internacionales pendientes de pago en Venezuela, sobresalen las importaciones pendientes de liquidación por 9,8 mil millones de dólares y los retrasos en los giros de las utilidades no remitidas al exterior por 4 mil millones de dólares. Las deudas pendientes de servicios internacionales de aerolíneas y seguros superan los 5,7 mil millones de dólares, situación que ha generado la cancelación de vuelos de 11 aerolíneas internacionales.

El servicio de la deuda externa, calculada en 104 mil millones de dólares, captura el 25 por ciento de los ingresos petroleros, equivalente al triple de los desembolsos del 2008.
La agudización de la crisis cambiaria en Venezuela es una realidad. Se avecinan más recortes de personal, el cierre de operaciones de las empresas a las que les adeudan divisas y la cesación de pagos de la deuda comercial.
¡Así es el socialismo del siglo XXI!