El candidato del Pacto Histórico volvió a referirse a la democratización. Ahora propone un gravamen que sus críticos dicen derivaría en expropiación. Candidato la defiende.
La propuesta dialogada por Gustavo Petro no está en su plan de Gobierno y no hay detalles sobre en qué consistiría. FOTO COLPRENSA Y Juan Antonio Sánchez
Gustavo Petro volvió a agitar el debate público con una nueva arista de su propuesta de democratizar la tierra en un eventual gobierno suyo. Ahora plantea la construcción de nuevos distritos de riego en tierras a cuyos dueños les cobraría un impuesto.
Tan solo una semana después de haber firmado la promesa de no expropiación ante una notaría, el candidato del Pacto Histórico insistió en una visita a Ciénaga de Oro, Córdoba, que no le va a “quitar la tierra a nadie”,.
No obstante, agregó que, de ser presidente, haría muchos distritos de riego “y como toda inversión pública, al hacer un distrito de riego nos tienen que pagar un impuesto, ese impuesto lo vamos a pedir en tierra y esa tierra va para las familias campesinas”.
Según explicó, su objetivo es que quienes trabajan la tierra pasen a ser copropietarios de ella. Esto no significa, según él, que los grandes poseedores perderían, sino que se volverian productivos, porque “no es lo mismo 3000 hectáreas de tierra sin agua, que 500 hectáreas con agua”.
En sus palabras, lo importante es que la tierra deje de ser un “sinónimo de codicia”, y que se transforme en un instrumento de producción, algo similar a lo que el pasado 21 de abril dijo desde Sucre su mayor escudero, Gustavo Bolívar.
El senador reelecto sostuvo ante un grupo de espectadores del municipio de Ovejas que en el país hay 15 millones de hectáreas de tierra improductiva, “porque son tierras trofeo, tierras que se robaron (…) y por eso no las producen”.
Y aunque el discurso no es nuevo en la campaña de Petro y es por eso que ronda cierto nerviosismo en torno a su candidatura, con el nuevo pronunciamiento, vuelve a alimentar lo que sus críticos interpretan como intención de expropiación.¿Qué hay en su programa?
Ahora bien, en su programa de Gobierno, lo que tiene que ver con distritos de riego es poco detallado. En el punto llamado Pacto por el campo, la promesa es reconstruir y potenciar la “institucionalidad agropecuaria”, especialmente la que tiene que ver con los procesos de mejoramiento y adecuación de tierras, entre otros.
Para Andrés Espinosa Fenwarth, consultor económico, agrícola y empresarial, la propuesta que verbalizó Petro en Ciénaga de Oro es una manera de disfrazar la necesidad imperiosa de tener más y mejores distritos de riego, con la expropiación de tierras.
Desde su punto de vista, es evidente la intención del candidato y de hecho, asegura que “si la entrega fuera de baldíos en poder la nación, no seria necesario pedir a cambio de la inversión publica tierras productivas”.
Por eso le preocupa la promesa de Gustavo Petro, pues no hay antecedentes en Colombia de nada parecido, y que así como el Estado tiene la responsabilidad de “ofrecer bienes públicos y regular adecuadamente y de forma sostenible el manejo del agua y sus cuencas hidrográficas”, no debe intercambiar la inversión pública por tierra, pues “ello equivale a una expropiación de tierras productivas.
Por su parte, Henry Amorocho, profesor de Hacienda Pública de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad del Rosario, considera que esta es una propuesta improvisada e irrealizable en el corto plazo, que requeriría modificar todo el sistema legal del país.
En el régimen constitucional y legal de hoy, no está contemplado nada similar. “Una cosa es pagar tributo y otra cosa es hacerse a la tierra de las personas como mecanismo de cambio por el pago de una obra”, explica, señalando que Petro mezcla cuatro temas distintos, como son los impuestos, el presupuesto y la propiedad y hasta una posible reforma agraria.
A diferencia de Espinosa Fenwarth, Amorocho no afirma que se trate de una propuesta de expropiación, porque la declaración de Petro es tan “poco aterrizada”, que habría que mirarla más a fondo.
Con todo, es difícil concluir las implicaciones de la propuesta del candidato, que con sus declaraciones sigue causando más preguntas que respuestas sobre el significado que para él tiene la “democratización”.
Desde su campaña, sin embargo, no dieron mayor detalle de la propuesta que el candidato estaría ampliando a medida que avance la campaña y se acerque el 29 de mayo.
Fuente: https://www.elcolombiano.com/